Alex tiene 15 años y nació intersexual. Junto a sus padres, vive en una cabaña aislada en la costa uruguaya, donde se mudaron para escapar de la discriminación. Sin que ellos lo sepan, dejó de tomar la medicación que suprime sus características masculinas. La llegada de una familia amiga desde Buenos Aires, encabezada por un cirujano especializado en correcciones corporales, pone en crisis el frágil equilibrio familiar y obliga a Alex a enfrentar decisiones sobre su propio cuerpo.