Palabras del director
“En el marco de un proceso político cultural de grandes cambios para la humanidad, como fueron los años 60’ y 70’, el Frente de Liberación Homosexual sostenía que no hay revolución real posible si no existe un profundo cambio moral y cultural en la sociedad que termine con la hegemonía del patriarcado. Pero fueron discriminados y burlados por la mayor parte de los grupos “revolucionarios” de la época que eran machistas y heteronormativos. La sociedad aún no estaba preparada para ellos. Sus ideas triunfaron muchos años después, impulsadas también por el movimiento feminista.
En el film, más allá de los relatos sobre la violencia física y psicológica sufrida por los protagonistas, me concentré en los manifiestos del FLH y los elaboré estéticamente con archivos encontrados para navegar como en un túnel del tiempo hacia la subjetividad de sus pensamientos en aquellos días.
En estos tiempos donde los discursos centrados en el odio, la intolerancia y la violencia se expanden en todo el mundo y es posible que gobiernen nuestro país amenazando con la quita de leyes conseguidas por la comunidad LGTB+, el film es un alarma para dar cuenta que hay que seguir militando el derecho a la igualdad y a la diversidad porque la historia es cíclica, ya que la humanidad es la misma y los antiderechos lo primero que buscan es borrar nuestra historia para que no halla registro de los crímenes del pasado y así tener carta blanca para volver a cometerlos. Por esto hoy hacer memoria es amar y resistir.”