Palabras de la directora

“Durante el 2016, año que transcurre el film, las mujeres argentinas comienzan a auto convocarse espontáneamente a través de las redes sociales para defenderse de los femicidios que crecieron a un nivel
alarmante en la Argentina. Estos movimientos se convierten en marchas gigantescas que hacen historia en nuestro país y se apodan “Ni una menos”. Las generaciones jóvenes, púberes y adolescentes luchan defendiendo posturas feministas, con una fuerza
que nunca lo habían hecho antes.

Y esta actitud juvenil es lo que me lleva a hacer esta película. He realizado películas anteriores centradas en la violencia explicita, extrema. En esta nueva película me interesa exponer algunos sobre-entendidos que las mujeres de generaciones mayores no pudimos ver durante tanto tiempo y que las jóvenes hicieron explícito.

Me inspiraron las diferentes acusaciones que realizaron alumnas de colegios secundarios, que durante años fueron acosadas, abusadas, por profesores y en ocasiones por sus propios compañeros. Ocurrió en el Colegio Buenos Aires, en el Colegio Pellegrini, en el nacional de San Isidro.

Las mujeres nos habíamos acostumbrado a naturalizar estas situaciones, en los colegios, en los trabajos, en todos los ámbitos.

“Las Pibas”, como se las llamó a estas chicas, abrieron los ojos a las generaciones mayores para que no se silencien más. Fueron también las jóvenes las que batallaron por imponer un gran logro, la ley del aborto.

Quise dejar constancia con esta película de esta unión de generaciones única.

A partir de escuchar a sus alumnas y apoyarlas, la protagonista, Miranda, comienza a transformar su vida. Su mirada sobre sus relaciones, su trabajo, su pasado y su futuro ya no puede ser la misma.
Abre los ojos a un nuevo presente.

Aunque la batalla de las mujeres continuó y continuará.

Agrego para terminar unas palabras de Simone de Beauvoir:

“No olvides jamás que bastará una crisis política, económica o religiosa para que los derechos de las mujeres vuelvan a ser cuestionados.”