Palabras de la directora
“Esta película habla del amor verdadero. De ese amor profundo que no conoce distancias, fronteras y mucho menos el paso del tiempo. Pero no solo del amor a otra persona, sino de ese amor que se profesa por los lugares y por los momentos en los que fuimos felices. Esta película habla de la memoria compartida. ¿Cómo es posible que dos personas que vivieron lo mismo, lo recuerden de manera diametralmente opuesta? ¿Qué sucede cuando el pasado te nubla el presente y te impide ver el futuro? ¿Cómo se vive si tu amor verdadero es ya solo un recuerdo lejano?
Esta película es una road movie con largas y sinuosas carreteras, paisajes deslumbrantes, cielos enormes, bullicio y soledad, aridez y exuberancia. Pero también es una road movie de personajes, donde la cámara sigue muy de cerca a los protagonistas, sin perder ningún matiz, gesto o silencio. El gran paisaje y el pequeño detalle conviven y se potencian para crear una película íntima, pero a la vez imponente.
Una luz natural y sin artificios para los exteriores, despojada de excesos que, a medida que transcurre el viaje lo va inundando todo, para que los protagonistas también encuentren su verdadera esencia y sus profundos deseos en la belleza, sin disfraz, del paisaje final. Por el contrario, los interiores de la primera parte de la historia son abigarrados, llenos de claroscuros y muy complejos, para transmitir así el estado en el que Carlos y Margarita comienzan la aventura, y contar cómo poco a poco se desprenden de todo para quedarse con lo esencial. Esta dualidad queda muy retratada con la luz y los encuadres que también tendrán un arco de lo más complejo a lo más despojado y simple.
La música cuya banda sonora original ha sido compuesta por Nicolás Guerschberg e interpretada por el grupo Escalandrum, liderado por Daniel “Pipi” Piazzolla, es el gran hilo conductor”.