Palabras del director
“Nací en Santiago del Estero. Ubicada en el norte de Argentina, es el lugar más caluroso de Sudamérica. A lo largo y ancho de la extensa llanura, la ciudad se encuentra entre el desierto y la aridez, una tierra castigada por un calor y humedad abrumadores. A la hora de la siesta, Santiago del Estero parece una ciudad fantasma. A 52 grados, sus habitantes viven como en cámara lenta. Almamula nació en esta tierra, como resultado de una herida emocional de mi infancia. Cuando comencé a escribir el guión, quería reinterpretar esta leyenda, sumergirme en sus antecedentes y comprender por qué se creó. Al igual que con muchas cosas inventadas por la iglesia católica, la Almamula fue creada para borrar todo lo que consideraban inmoral o una amenaza. Así que al final, Almamula no cuenta la historia del monstruo que vive en el bosque, sino el monstruo que nosotros, como seres humanos, creamos en torno a la sexualidad, y cómo todo lo que es diferente a veces nos asusta.”